Respiración para aumentar tu energía (Ujjayi) - Yoga Angelical
- Maritza López Lasso

- 15 may 2020
- 4 Min. de lectura
El ejercicio que practicaremos hoy es la respiración Ujjayi, una palabra del sánscrito que significa “victorioso”. Y en realidad cuando practicamos esta respiración, los pulmones se hallan completamente expandidos, con el pecho desplegado como el de un poderoso conquistador.
En esta técnica de respiración la inspiración y la exhalación se realizan a través de la nariz, permaneciendo la boca cerrada. Adicionalmente el ejercicio exige que tanto la inhalación como la exhalación tengan la misma prolongación, la misma calma y fuerza.
Esta respiración es particularmente energizante; esta energía se convierte en calor y durante la práctica se emana una sudoración abundante, por medio de la cual se eliminan las toxinas para purificar el cuerpo. Además, ventila los pulmones, y calma y tonifica el sistema nervioso.
La energía angelical con la que desarrollaremos este ejercicio es Hahaiah, la duodécima del calendario angelical #1, que puedes encontrar en nuestra página web www.positivamentepty.com Hahaiah es el ángel protector de los nacidos entre el 16 y el 20 de mayo y su nombre significa “Dios de Refugio”.
Hahaiah te ayuda a descubrir tu universo interior por medio del cuestionamiento y el examen de tu vida personal, facilita la interpretación de los sueños y sirve de vía de acceso hacia los misterios ocultos y hacia la mediumnidad. También, transforma las actitudes destructivas en actitudes positivas.
Es posible que durante la práctica recitativa con la energía de Hahaiah tengas alucinaciones o te sientas presa de una gran agresividad o impulsividad, o bien que confundas los sueños con la realidad o que presentes otras distorsiones desagradables. [PAUSA] No te preocupes demasiado por esto. Recuerda que las distorsiones son como las malas hierbas de un terreno en el que aspiras a realizar una cosecha. Tienes que extraer esas malas hierbas para mejorar la tierra.
Para llevar a cabo la práctica de respiración Ujjayi siéntate cómodamente en el suelo o en una silla o, si prefieres, ponte de pie. En cualquiera de estas posiciones debes mantener firme tu espalda y la columna vertebral, pero debes equilibrar esta firmeza con la movilidad de los músculos de la espalda ya que estos se expanden y se contraen con el flujo de la inspiración y la exhalación.
Una vez que has escogido la posición, vas a bajar la cabeza hacia el tronco y a elevar la estructura interna del pecho hacia el mentón. Manteniendo esta posición vas a inhalar lento por la nariz y exhalar por la boca generando un sonido así: “HHHAAA”. Ahora cierra tu boca manteniendo la garganta en la misma posición mientras continúas exhalando. O sea, permite que siga emitiendo el mismo sonido, pero con la boca cerrada. Procura que el tono salga de tu garganta y no de tu nariz durante todo el ejercicio.
Manteniendo la misma posición, inspira por la nariz de manera lenta, profunda y regular el nombre de Hahaiah. Escucha el sonido agudo de la respiración. El aire llena primero el estómago, luego la caja torácica y finalmente la parte superior del pecho. Asegúrate que el aire haya bajado lo más posible al fondo de los pulmones. Retén el aire lo más que puedas luego ve dejando que el aire salga de manera lenta, profunda y uniforme.
Repite este ejercicio de 7 a 14 veces pronunciando mentalmente el nombre de Hahaiah.
Te dejo un momentito para que lo practiques.
Ahora, imagina que estás sentado cómodamente en un sillón. Todo está oscuro, y aun así sabes que estás en una sala de espera. ¿Qué estás esperando? ꟷ Te parece que una voz sutil en tu interior preguntara ꟷ. Casi simultáneamente te das cuenta de que llevas mucho tiempo ahí sentado. Tal vez toda una vida. O más…
Muy lentamente, de manera casi imperceptible, comienza a encenderse una luz y tienes la sensación de despertar de un sueño. Te das cuenta de que la luz no es externa a ti, sino que se trata de una luz en tu interior. Es una luz que te aporta Conocimiento y Comprensión. Comprendes, sobre todo, por qué has venido precisamente ahora, en este período, a hacer tu experiencia de vida en este hermoso planeta llamado Tierra.
Sabes que -- la tierra es un ser vivo como nosotros los humanos y que, como nosotros, se rige por ciclos. Sabías, al momento de encarnarte, no solo que la tierra estaba a punto de terminar la era conocida como Piscis, de 2.000 años, y comenzaría con la era de Acuario, lo cual aportaría grandes cambios, sino además que estaba a punto de cumplir un ciclo completo de 26.000 años terrestres y que los cambios en la estructura de la Tierra serían monumentales. Recuerdas que hace aproximadamente dos mil años también prevaleció un tiempo repleto de cambios. Recuerdas que hubo una gran batalla entre el miedo y el amor y que ganó el miedo.
Si hubiera ganado el amor la gente se habría dado cuenta de sus poderes superiores, de la habilidad de la mente humana de trascender su cuerpo, de la capacidad de hacer viajes astrales y de sentirse conectado con el poder ilimitado del amor. Si esto hubiera ocurrido los humanos habrían terminado con su sensación de separación. Pero gano el miedo. También ahora hay un enfrentamiento entre el amor y el miedo. Los defensores del miedo están tratando de controlar al mundo, pero no lo lograrán porque los partidarios del amor están recordando quienes son y su gran poder.
“Eres consciencia que se encarna una y otra vez. ꟷ Te sopla una voz en tu interior. Es tiempo de que aceptes tu poder. Levántate y ayuda a que también otros comprendan quienes son. Eres más fuerte de lo que imaginas. Eres poderoso. Eres dios. Recuérdelo”.








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